Me adentré en este laberinto, de inspirar a otros seres a lograr sus metas, a no rendirse ante la dificultad, a mirar el fracaso como un amargo paso hacia el éxito, de mirarle fijamente a la cara y decirle no acepto un no por respuesta, de buscar alternativas y no excusas, de ser un guerrero.
Tú no eres un fracasado, y disculpa si te tuteo, solo que no has encontrado tu camino, y sigues frustrado por ser un esclavo más del sistema, pero no es tarde para darte cuenta. Si en cambio, estás en el camino y no has llegado, tranquilo, todo llega, no te rindas y sigue escalando peldaño tras peldaño, paso a paso. Rodéate de gente que está creciendo cada día, que te hace críticas constructivas, al mismo tiempo, que te hace cumplidos sobre las cosas buenas que haces, que te anima a seguir, y te brinda su apoyo. Y si alguien te dice que no puedes, te infravalora, no se merece estar en tu camino, ya te verá en la cima, así de simple.
Mientras antes lo pongas en práctica, antes verás los resultados. Pues cada día es una oportunidad para avanzar y ser lo que siempre has querido. Desbloquea el miedo y desarrolla tus habilidades, solo tú puedes hacer realidad la vida que has soñado, al multiplicar el potencial que tienes.
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